¿Se atreve con los patrones?

El uso de estampados puede llevar rápidamente a una falta de gusto, y esto basta para desacreditar todo un traje a medida, aunque sea coherente en su conjunto. El principal problema de los patrones es que hay muchos. Peor aún, aunque pudiéramos enumerarlos, no habríamos acabado con ellos porque pueden presentarse en diferentes tamaños, estampados (como un micropatrón, o por el contrario un patrón muy asertivo) formas y colores dependiendo de cómo los interpreten las marcas a través de sus colecciones.
Que no cunda el pánico, vamos a darle una breve lista de los principales estampados (que se pueden llevar) y cómo combinarlos fácilmente siguiendo unas cuantas reglas.
 
LOS DISTINTOS TIPOS DE ESTAMPADO
 
Existen tres tipos básicos de patrones en la moda masculina, y se los vamos a presentar a continuación
 
En primer lugar, los estampados de cuadros Ya sean lisos (faux-uni, guinga o cuadros pequeños en una camisa) o más o menos marcados, como el Príncipe de Gales en un traje, los cuadros siempre destacan. Es un patrón muy común y fácil de usar. Sin embargo, hay una regla que debe observar sobre la forma de su cuerpo. Si es usted delgado, opte por cuadros pequeños que se mezclen bien, de lo contrario su complexión quedará ahogada por el estampado del traje, y eso no suele ser una visión agradable).
 
Luego están las rayas
 
Son fáciles de llevar en una camisa sencilla o financiera (con cuello en contraste) o en sus corbatas de club (prefiera las clásicas azul marino/roja/gris para empezar). También quedan muy bien sobre un traje, siempre que respete la forma de su cuerpo. Cuando sea delgado, optará por rayas bien combinadas, y cuando sea más imponente, puede buscar estampados más asertivos.
 
Paisley, flores de lis, cruces, lunares, puntos de plumas, animales… son motivos fuera de lo común que se repiten regularmente en el estampado. Lo ideal sería encontrarlos sólo en las corbatas y nunca en sus trajes. En cuanto a las camisas a medida, cualquier cosa es aceptable siempre que sea informal. Estos estampados son demasiado asertivos para llevarlos en un contexto formal o de negocios.
 
Para concluir, he aquí las dos reglas esenciales a seguir para montar sus diseños sin riesgo.
 
Juegue con las dimensiones
 
Preste atención al tamaño de sus diseños. Deben tener diferentes proporciones para crear un patrón que diga mucho del cuidado y la sutileza que aporta a su atuendo. Además, aquí también entra en juego la morfología. Así que evite los estampados demasiado invasivos que ahogarían una complexión delgada y esbelta.
 
Piezas fuertes y básicas
 
¿Está familiarizada con el concepto de piezas básicas y fuertes? Un conjunto debe tener piezas básicas (piezas muy lisas como una camisa blanca, por ejemplo), que calmarán las piezas fuertes (trajes financieros marcados o príncipes de gales muy asertivos o una corbata con estampado paisley, por ejemplo). Las mismas reglas se aplican a los patrones. Algunos son más fuertes y llamativos que otros, que son más apagados.
En cada composición, intente alternar entre un estampado fuerte, un estampado clásico (como las rayas sencillas) y un estampado discreto, apenas perceptible. Esta es, con diferencia, la combinación ideal para un conjunto sofisticado que no sea de mal gusto.
He aquí dos ejemplos de cómo poner todo esto en práctica:
 
1. Un traje Príncipe de Gales, una camisa azul cielo y una corbata de lunares. Las piezas clave de este atuendo son el traje y la corbata, ambos con estampado. Si el Príncipe de Gales es más pronunciado, los lunares de la corbata tendrán que mezclarse más. Por último, una camisa lisa azul cielo (o blanca) calmará las cosas y separará las dos piezas fuertes creando contraste. El clutch debería ser liso (2 piezas estampadas son suficientes cuando el traje es una de ellas).
 
 
2. Un traje a rayas desteñido, una camisa a rayas y una corbata de seda granadina. Se trata principalmente de un juego de rayas. Las dos piezas fuertes son la camisa y el traje. Las rayas más firmes de la camisa jugarán con las rayas más finas del traje. Por último, la granadina de seda es lisa pero tiene un carácter fuerte debido a su textura, por lo que calmará el resto del conjunto. El clutch también debería ser liso (del mismo color que la corbata, por ejemplo, pero en un tono más claro o más oscuro para evitar un recordatorio poco sutil).
 
 
Para concluir con el secreto de los estampados, pensamos que en caso de duda sobre un conjunto, lo mejor es aligerarlo. Cuantos más estampados reúna en un conjunto, más riesgos correrá, lo que probablemente hará que el conjunto resulte más recargado que otra cosa.
 
¿Nuestro mejor consejo? Empiece adornando sus conjuntos lisos (trajes y camisas) con una corbata estampada y un bolso de mano con carácter. A continuación, empiece a añadir una camisa a rayas. Después, cuando pase a los trajes estampados, repita la operación desde el principio, empezando con piezas lisas y evolucionando añadiendo estampados a medida que avanza.